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Artista del mes: Mario Marzo

Actor, pianista y podcaster, Mario Marzo nació en Madrid en 1995. Hijo de pianistas, se puede decir que lleva la música en la sangre. Comenzó a estudiar piano con sus padres a la edad de seis años. A los 18 años, obtuvo el grado Profesional de Piano con la distinción de Premio Extraordinario Fin de Grado en las especialidades de piano, música de cámara y acompañamiento.

Tras finalizar los tres primeros cursos de Grado Superior con matrícula de honor en el Conservatorio Superior de Música de Madrid, continuó su formación en la Hochschule für Musik “Hanns Eisler” de Berlín.

Este multifacético joven se dio a conocer al gran público a los trece años, cuando entró a formar parte del elenco de la serie televisiva Los protegidos. Fruto de la casualidad, pues la productora buscaba un actor joven que supiera tocar el piano, a partir de ese momento combinó la actuación con la música.

Su maestría al piano se ha visto recompensada con numerosos galardones, como los obtenidos en el concurso Veguellina de Órbigo (León) y el concurso Intercentros (Comunidad de Madrid).

Ha actuado como solista con la banda de música del Conservatorio Profesional de Música de “Amaniel” y junto a la orquesta sinfónica del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, bajo la batuta de Jesús Amigo. Además, lo hemos podido ver en recitales como los de la Hammerklavier International Series de Barcelona y el Steinway Hall de San Francisco, entre otros. También grabó un recital de piano y música de cámara en el ciclo “Jóvenes Intérpretes”, de Radio Nacional de España.

En la actualidad combina su faceta de padre de gemelos con la de pianista y creador de contenido. Presenta dos pódcast con gran número de seguidores, que no le pierden la pista en las redes sociales.

NUESTRA ENTREVISTA CON MARIO MARZO

A continuación, puedes leer todo lo que nos contó Mario Marzo durante la entrevista con Hinves. 

1. Pianista, daltónico e influencer: ¿cuál de las tres facetas pesa más en tu día a día?

Daltónico, sin duda. Combino mal la ropa, les enseño mal los colores a mis hijos… Las facetas artísticas tienen más o menos peso en mi vida, dependiendo de los proyectos, pero ver el cielo rosa es para siempre.

2. ¿Cuál es tu primer recuerdo con un piano? 

Con la música de piano, escuchar el tercer concierto de Rachmaninov interpretado por Martha Argerich durante un viaje en coche con mis padres a Cádiz. Yo tenía cuatro años y cantábamos juntos el primer movimiento de principio a fin. 

Con un piano como tal, era el Yamaha de mi casa, recuerdo a mi padre y a mi madre sentados a él, dando clase a sus alumnos. Mi padre dice que yo me dormía las siestas bajo el piano con ocho meses, pero no lo recuerdo. Tendremos que creerle.

3. En tus redes sociales combinas contenido mainstream con otro de índole musical. ¿A la gente joven le interesa la música clásica?

Mucho más de lo que pensamos. Es cierto que hay muchísima más gente joven a la que no le interesa la música clásica que a los que sí, pero eso no significa que los jóvenes no quieran emocionarse, no se sorprendan ante el virtuosismo o que les parezca cosa de viejos.

Tienen mucho más acceso a la música del que teníamos cuando yo tenía siete años y viven con pasión lo que les gusta. Ahora falta echarles una mano y mostrarles el maravilloso mundo que la música les puede abrir.

4. Ves en una estación de tren un piano vacío. Te sientas. ¿Qué sería lo primero que empezarías a tocar y por qué?

A mis 18 años aprendí por las malas que si tocas uno de esos pianos, puedes perder un tren. En la estación de trenes de París, encontré un piano y me puse a tocar el Scherzo 3 de Chopin, que estaba estudiando por aquel entonces.

No lo tenía memorizado por completo y las partes más complicadas no las tenía “en dedos”, pero aproveché la oportunidad para estudiarlo un poco. Agrupé a un pequeño público que me aplaudía en las pausas, empecé a tocar otras piezas, la sesión de estudio comenzó a convertirse en un recital… y nunca llegué a la cena a la que me habían invitado.

5. ¿Sientes prejuicios por parte del mundo de la música clásica al ser pianista e influencer?

Muchos, pero los entiendo. Uno de los atributos que siempre me han alabado es ser un artista “interdisciplinar”, cualidad que considero me convierte en mejor profesional. Estudiar las sonatas de Beethoven me hace mejor actor; los rodajes y un guion hacen que toque mejor a Schumann. 

Pero, curiosamente, creo que también es una cualidad que juega en mi contra. Me consta que varios directores y programadores no me han escuchado “porque es actor”. Prefieren a un pianista que solo tenga el piano y que, si su nombre les suena, sea por lo que hacen en la música. Entiendo la reticencia, pero me encantaría que me escucharan.

6. En 2024, ganaste el premio Ondas al mejor pódcast revelación con “¿Quieres ser mi amigo?”. Este mes estrenas tu siguiente pódcast, “El vomitorio”, que casualmente es un pódcast de música. ¿Está el público mainstream preparado para escuchar un pódcast de música clásica?

“El vomitorio” es un pódcast de arte que pretende descubrir al público esas historias y curiosidades que querrán contarles a sus amigos. Los primeros episodios han sido grabados en colaboración con la Quincena Musical de Donosti y Les Arts, en Valencia, pero nuestro objetivo es comunicar, siempre con pasión y emoción, desde las obras maestras de la música clásica hasta las galerías de los mejores museos del mundo.

El nicho de público de pódcast apasionado por la divulgación es el tercer mercado más grande dentro del mundo de las ondas. La gente quiere aprender, quiere conocer y quiere descubrir. Cómo Beethoven plantó cara a Napoleón, la leyenda de Mendelssohn, un carnicero y Bach… Son historias increíbles que entretienen y ayudan a comprender mejor el contexto.

7. Si alguno de tus hijos quisiera ser pianista, ¿qué consejos le darías y de qué forma te gustaría que encauzara su educación?

Como me dijo mi madre cuando le comenté a los seis años que quería tocar el piano: “¿Por qué no eliges un instrumento más fácil?”

8. ¿Por qué la ambición de ser solista está tan extendida entre los pianistas?

Todos queremos ser como nuestros ídolos. Los pianistas tenemos tanta variedad a la que admirar que nos aseguramos enamorarnos platónicamente de la figura de un solista. Te puede gustar Gould, Richter, Schiff, Trifonov… Hay mucho donde elegir y verse reflejado.

9. Tres libros y tres películas que todo el mundo debería leer o ver. 

Los tres libros que recomiendo son Ensayo sobre la ceguera, Meditaciones de Marco Aurelio y Sapiens: de animales a dioses. Como películas, Blue Valentine, Cinema Paradiso y Parásitos.

10. Un deseo que le pides a la vida para los próximos años.

Que me siga apasionando tanto mi trabajo. Espero no perder nunca las noches sin dormir por la emoción que me provocan los proyectos en los que trabajo.

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